Los veranos los pasábamos en Marxuquera, que bien lo pasábamos por las tardes cuando nos reuníamos mis amigas y yo en el bar mickey. Nos juntábamos con chicos en la Ermita a fumarnos el «cigarrete» y escondiéndonos de nuestros padres para que no nos pillaran. En fiestas de Marxuquera lo pasábamos genial en las verbenas, era la única época del año en que podíamos «venlar» hasta tarde. Mis amigas de entonces eran Sonia, Pamen y Marta. Eramos inseparables, dios mío cuanto las añoro. Eran veranos y fines de semana en invierno que lo pasabamos de miedo. Quien me iba a decir que de todas mis amigas solo quedaria una, la que no ha dejado de preguntar y de visitarme. No voy a decir cual de las tres es pero ella sabe muy bien quien es, y que en el fondo de mi corazón la llevó.